Resaca de la primera vuelta electoral
Cuando aún estamos por borrarnos de la cara la sorpresa del resultado electoral, tan propicio con el Partido Social de la Unidad Nacional, es hora de sacar algunas conclusiones referentes a la jornada del domingo, tan decisiva para la política colombiana de los próximos cuatro años.
En sus primeras declaraciones después de conocerse los resultados, tanto Santos como Mockus han expresado sus perplejidades ante la ventaja obtenida por el primero. Mockus se ha sentido decepcionado por las previsiones de los sondeos electorales, que le concedían un empate técnico con respecto a Santos.
Y es que ha habido dos grandes derrotados en las elecciones del domingo: las empresas de intención de voto y las FARC.
En lo que se refiere a las empresas demoscópicas, hay que decir que sus pronósticos resultaron todos fallidos. Sus responsables se justifican argumentando que el electorado fue muy dinámico en la última semana, tiempo en el que muchos colombianos cambiaron de opinión. Más parece que la representatividad de sus sondeos estuvo distorsionada por un error de planteamiento, y es que se dirigieron, en buena medida, a los núcleos urbanos de población despreciando el voto rural.
Las otras grandes derrotadas fueron las FARC, que amenazaron con reventar la jornada del domingo y sus intimidaciones quedaron en simples fuegos de artificio. No se registraron incidentes graves en la práctica totalidad del territorio nacional.